miércoles, 4 de noviembre de 2015

#61 Jarrón

Queridos Reyes Magos:


Este año he sido muy buena. Ya soy mayor y ayudo a poner la mesa siempre. Además, estoy sacando muy buenas notas en el cole, casi como Ion, que es el más listo. La andereño me ha dicho que voy muy bien y que tengo que seguir estudiando mucho si de mayor quiero ser enfermera, como mi amatxo. Yo de momento solo quiero pasar a tercero.


Como he sido buena y como vosotros sois magos, quiero pediros un favor muy especial. El otro día rompí sin querer el jarrón que más le gustaba a mi ama y me gustaría recuperarlo. Creo que es el primer regalo que le hizo mi aita. Solo os pido eso. Ya sé que es difícil, pero como solo es una cosa, podéis concentraros mucho y conseguirlo, porque como sois tres y sois magos... Mi aita dice que no podréis conseguirlo, pero yo no le voy a hacer caso. Confío en vosotros. Él no. Él está muy triste. Dice que lo del jarrón no es mi culpa, pero yo sé que sí. Y además está enfadado, pero no conmigo. Creo que con Dios, porque se ha llevado a ama al cielo. Y voy yo y rompo su jarrón… Lloré mucho ese día. Los dos lloramos juntos. Casi como el día del accidente. Pero mi aita es muy fuerte, ¿eh? Y ha sido muy bueno también. Tenéis que traerle lo que os pida en su carta.


Yo este año solo os pido eso. No quiero juguetes, no me apetece mucho jugar. Y como sé que no me podéis traer a mi ama…


Atentamente,

Lidia.




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lunes, 21 de julio de 2014

#60 Placeres

Abrir los ojos por la mañana 
e impregnarme de olor a café y zumo de naranja. 
Salir a dar una vuelta, 
feliz, 
acompañada por el olor del mar 
y el sonido de las olas, 
a lo lejos. 

Saludar a los conocidos 
que huelen a colonia o a crema de sol, 
intentando sonreír para ser simpática, 
pero odiándolos por dentro 
por no dejarme captar el olor a césped recién cortado 
del parque de la fuente. 

Olor a comida, al medio día, 
a (casi) cualquier comida, 
cuando estoy muerta de hambre. 

Dejar que mi mente me lleve al pasado 
a la hora de la siesta 
y llegar a recordar el olor de aquel hotel, 
de ese chico, 
de aquella amiga. 
A sábanas limpias, 
a pastelería, 
a libro nuevo. 
A rotulador permanente, 
a pintura 
o a esmalte de uñas 
(pero sólo para un ratito, que si no me mareo). 
A fuego de San Juan. 

A flores en primavera 
(pero en el monte, no en casa). 
A castañas en invierno. 
El otoño no me gusta, 
no quiero recordar ningún olor. 
Desear que a la tarde empiece a llover 
para percibir el olor a tormenta de verano. 

Y dejar tu olor para la noche.











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jueves, 29 de mayo de 2014

#59 Página en blanco

Enfrentarte a una página en blanco no es tan difícil cuando sabes exactamente lo que quieres decir, cuando sabes qué es lo que quieres expresar y cómo quieres hacerlo, pues ya has pensado en todas las posibilidades, en los efectos que causará cada fonema o cada palabra en el lector y piensas que debes transmitir aquello que tienes dentro, ya que sino, explotarás.

No es mi caso.

Vengo aquí simplemente a pasar el rato (sinceridad ante todo). Una página en blanco simboliza para mí un mundo entero por descubrir, el Nunca Jamás que tengo ahora mismo, yo en mi cabeza. Un universo del presente donde nada está creado y donde nada tiene sentido. O sí.

Pero no es el caso.

Nada tiene sentido en mi cabeza, en mi universo, porque no. Y sí, "porque no" puede decirse. Sí en esta página en blanco, que ya no está en blanco. "¿Qué sentido tiene titular Página en blanco a una página que, obviamente, no está en blanco?" os preguntaréis, inquietos. O no. Pero ya os he dicho que mi Nunca Jamás no tiene sentido: nunca, jamás.

¿Quiénes sois, lectores? ¿Existís? ¿Hola? Puede que simplemente seáis personajes de Nunca Jamás. ¿Peter? ¿Garfio? ¿Estáis ahí? No, Peter nunca entendería estas nuevas tecnologías. De hecho creo que no llegó a aprender a leer. Y para Garfio yo no soy tan importante. Puede que en mi Nunca Jamás no existan estos dos (no, no sé quienes viven en mi universo, ¿en serio pretendéis que lo sepa todo? ¡Nadie me ayuda!).

No lo sé, yo no entiendo nada, nada tiene sentido. O sí. No sé por qué escribo, si no voy a decir nada. ¿Un simple pasatiempos? ¿Espero a Godot? No lo creo, suena demasiado a una marca de pañales. Sin embargo, sigo aquí y tú sigues leyéndome. ¿También esperas a Godot? ¿Quieres descubrir mi Nunca Jamás? ¿Quién eres? ¿De dónde vienes? ¿A dónde vas? 

Ayúdame a conocerme, personaje de mi mundo.













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sábado, 29 de marzo de 2014

#58 Preguntas de un obrero que lee

¿Quién construyó Tebas, la de las Siete Puertas? 
En los libros figuran sólo los nombres de reyes. 
¿Acaso arrastraron ellos bloques de piedra? 
Y Babilonia, mil veces destruida, ¿quién la volvió a levantar otras tantas? 
Quienes edificaron la dorada Lima, ¿en qué casas vivían? 
¿Adónde fueron la noche en que se terminó la Gran Muralla, sus albañiles? 
Llena está de arcos triunfales Roma la grande. Sus césares ¿sobre quienes triunfaron? 
Bizancio tantas veces cantada, para sus habitantes ¿sólo tenía palacios? 
Hasta la legendaria Atlántida, la noche en que el mar se la tragó, 
los que se ahogaban pedían, bramando, ayuda a sus esclavos. 
El joven Alejandro conquistó la India. ¿El sólo? 
César venció a los galos. ¿No llevaba siquiera a un cocinero? 
Felipe II lloró al saber su flota hundida. ¿Nadie lloró más que él? 
Federico de Prusia ganó la guerra de los Treinta Años. ¿Quién ganó también? 
Un triunfo en cada página. ¿Quién preparaba los festines? 
Un gran hombre cada diez años. ¿Quién pagaba los gastos? 
A tantas historias, tantas preguntas. 













Bertolt Brecht

domingo, 16 de marzo de 2014

#57 Reflejo

"[...]
–¿Quién eres? –preguntó.
No obtuvo respuesta tampoco ahora, pero durante un breve instante llegó a dudar de si era ella o la del espejo la que había hecho la pregunta. Sofía apretó el dedo índice contra la nariz del espejo y dijo:
–Tú eres yo:
Al no recibir ninguna respuesta, dio la vuelta a la pregunta y dijo:
–Yo soy tú
[...]".
Jostein Gaarder - El Mundo de Sofía
***


Ella es aquella chica pálida, vestida con una camiseta negra y unos vaqueros. Pero no quiere ser ella. Pasa el cepillo por su largo pelo negro, se lo recoge en un moño y se mira en el espejo. ¿Quién es esa chica? ¿Por qué tiene este aspecto? Se suelta el moño. ¿Cuándo ha cambiado tanto? ¿Por qué se mueve de esa forma? ¿Todos la verán así? Ella no siempre se ve así... ¿Por qué tiene tantas dudas? ¿Alguien la conoce? Se hace una trenza en un lado. ¿Se conoce? Bueno, el espejo no miente... Pero ¿quién es ella en realidad? ¿Es la chica del espejo? ¿O la del espejo es solo una copia? 

¿Hay acaso diferencia entre las dos cosas? La verdad es que las dos figuras son completamente iguales.

Lanza el peine contra aquel espejo de doscientos años, el cual se hace añicos, en el mismo momento en el que la chica del espejo intenta agredirla con un peine. Siente miedo. El reflejo desaparece, pero ella sigue allí, entre cristales. No se reconoce. “¿Por qué?” grita. Nadie contesta. El eco de sus preguntas bailará en su cabeza durante todo el día. Y el espejo roto seguirá en el mismo sitio cuando vuelva.

Sin embargo, no se ha librado de su reflejo, quien aprovecha cualquier lugar para reírse de la chica, imitándola, robándole la identidad, preguntándole a gritos cuestiones sin respuesta alguna. Siendo ella, más que ella misma. La chica se ha vuelto una interrogación con un reflejo con personalidad.









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miércoles, 5 de marzo de 2014

#56

Siempre he dicho que mi meta en la vida no es casarme, ni ganar mucho dinero, ni tener cuatro coches. Que yo lo que quiero es ser FELIZ. Hasta ahí, todo bien.

Pero me pregunto si merece la pena reservar mi felicidad a ciertos momentos cómicos riéndome por chorradas en el coche (sí, va por ti). A borracheras tontas con las de siempre (sí, vosotras). A caídas ridículas imitando a actores de televisión (hola). A sobremesas que se alargan sin que nos demos cuenta (vosotros no me leeréis, baina kaixo). A recuerdos, a canciones. A la sensación que queda cuando te acabas un libro o cuando empiezas a tocar un instrumento nuevo y suena bien. A acordarte de personas de tu pasado. A cuando vas de viaje, cuando llega el verano, cuando ves una foto antigua. A un concierto, un beso, un mensaje, una mirada, un Snapchat. A un aprobado, una película, un buen postre. Un sueño bonito, una caricia, una conversación. Un abrazo de oso. A ayudar a alguien que lo necesita. A ver un gatito pequeño, escuchar la risa de un bebé, encontrarte con alguien a quien no ves desde hace mucho. 

Y sí, merece la pena.









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domingo, 23 de febrero de 2014

#55

A veces solo necesitas llorar. Que las lágrimas suicidas se estrellen contra el suelo. Estar triste, y llorar. Que todo vaya mal, que el paro suba, que mañana sea lunes, que no te haya gustado la cena, que te acuerdes de un viejo amigo, que exista la monarquía, que falte mucho tiempo para verano, que muchos tengan poco y pocos tengan mucho, que tengas los pies fríos, que la gente muera de hambre, que te duela el alma, que tu novio no sonría, que tengas que hacer una maleta para la universidad, que te marees en el autobús, que te pare la Guardia Civil, que muera Mufasa, que presencies un accidente, que no quede chocolate, que alguien te diga que leer es aburrido, que no se escuche al pueblo, que no puedas dormir, que no funcione el Whatsapp, que haga frío, que haga calor, que exista la pobreza, que Rajoy sea un incompetente, que te obliguen a estudiar, que tengas que hacer frente a viejos traumas, que tu madre te diga que ordenes la habitación, que la vida pase rápido, que lo haga lento, perder a gente que necesitas. Y llorar.

Llorar por nada y por todo. Porque lo que tienes dentro te ahoga. Porque es inútil vivir con los ojos llenos de mar. Llorar de rabia, de tristeza, de vergüenza, de agobio, de frustración, de cansancio, de dolor, de angustia. Por ser muy hombre y muy mujer; y muy niña y muy niño. Por echar de menos. Por necesidad.

Llorar es medicina y enfermedad: el síntoma y la cura. Lo que no debe hacerse, pero lo que emociona presenciar. Llorar es bueno, pero la causa es mala; por lo que llorar es malo, pero bueno para seguir. Es desierto y oasis.

Llorar es bueno: lo malo es no sentir.












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